Los nombramientos en misiones diplomáticas hechos por el Gobierno del presidente Gustavo Petro se encuentran en el ojo del huracán, pues muchas de estas designaciones no reunirían los requisitos para desempeñar tales funciones.

Las alarmas se dispararon tras el nombramiento del embajador en México, Moisés Ninco Daza, de quien se ha dicho ni siquiera tiene título profesional, pero ahí más.

De acuerdo con la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular (Unidiplo), la entidad tiene lista las demandas de algunos de estos nombramientos, y uno de los que encabeza el listado es Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela,  quien no hace parte de la carrera diplomática.

“Unidiplo se permite informar que los nombramientos de personas que no pertenecen a la Carrera Diplomática y Consular sin cumplir los requisitos de ley, y sin tener en cuenta que hay funcionarios de la Carrera para ocupar los cargos, serán demandados”, dijo Unidiplo a través de un comunicado. 

Se recordó que algunos nombramientos de este tipo han sido declarados nulos por los entes judiciales, como es el caso de Manuela González Velásquez, nombrada  en el cargo de segundo secretario de Relaciones Exteriores del Ministerio en la Embajada de Colombia en Suiza, cargo que se designó en el Gobierno del entonces presidente Iván Duque.

Ahora llama la atención que el gobierno Petro, que en campaña cuestionaba estas actuaciones, incurra actualmente en estas irregularidades.

Se volvió a mencionar el embajador en México Ninco Daza, cuyo único título profesional ha sido ser asesor de Petro en su paso por la alcaldía de Bogotá.

Y en México también hay otro caso: el del nuevo cónsul de Colombia en el país manito, Andrés Hernández, quien solo ostenta el grado de comunicador social y periodista, además del de asesor de Petro cuando era senador.

Sumado al caso de Armando Benedetti, como titular de la embajada venezolana, están los de Nicaragua, con el embajador León Fredy Muñoz, como si fuera poco involucrado en un lío judicial de tráfico de drogas.

En Argentina se mencionó al embajador  en ese país, Camilo Romero, como otro de los nombramientos cuestionados por no pertenecer a la carrera diplomática.